lunes, 24 de agosto de 2009

Extraño pero lindo

Celebré mi fiesta de cumpleaños en mis vacaciones. Fue una linda celebración. Lo más lindo fue jugar con tod@s l@s niñ@s de mis amigas en la piscina. Nada como resumir y vivir las ganas de ser madre en un día. Pero esto es un tema para otro comentario. Son unos momentos muy extraños que tuve, que quisiera compartir.
Hace mucho que no salía de vacaciones, y hace mucho más que no salía con mi novia de vacaciones. En el último tiempo el trabajo y la rutina me habían rodeado tanto que ya ni nos veíamos, ni aún cuando estuvieramos durmiendo juntas. Nos hizo muy bien estar forzadamente juntas las 24 hrs. del día, de repente tener muchos momentos para compartir. Como sé que hay confianza, el silencio no era incofortable y de a poco empezamos a hablar de nuevo, de otras cosas, no del día a día. En medio de todo este revival de confianza entre las dos, fue mi fiesta. Estaba invitada mi ex, una de las mejores amigas de mi hermana, y de alguna manera de la familia. Claro, no es que yo no quisiera verla, soy sincera, me moría de ganas de verla, es la mujer que más he amado en mi vida, y probablemente lo siga haciendo durante el resto que me queda. En fin, que venía, y por suerte se había dejado el novio en casa. Si, novio, hay mujeres, que después de estar con mujeres (o sea, no una sola que se puede tildar de "prueba", sino varias, o sea te encanta dormirte abrazada a unas tetas, digamoslo como es..) son capaces de volver a estar con un tipo seriamente. Y aunque este tambien sea un tema para otro blog más largo, como coño se puede estar con un tipo si has estado enamorada de mujeres durante años? A ver, yo soy este tipo de lesbiana que se dice de la edad de piedra, o sea de siempre, y eso de estar con hombres para mí es algo no imaginable, pero bien, hago esfuerzos por entender a mis amigas heterosexuales cuando me hablan de los problemas de sus parejas, y bueno, finalmente a ellas les gustan los hombres, que se le va a hacer. En fin, que me estoy metiendo en el tema que no quería meterme.
Quizás tenga que explicar un poco como es mi novia para situaros mejor en el contexto. Es tímida, amorosa, morena y bella, con un cuerpo muy bonito, pero que jamás luce, que se piensa mucho lo que dice, jamás llama la atención en una fiesta con risotadas fuertes como yo, es callada y difícil de saber lo que piensa, una mujer muy agradable. Además es chilena, o sea los celos son un tema para ella, y a mí la situación se me hacía un poco enredada, sabiendo además que mi ex es la campeona en ser desubicada, celosa para atrás (seguro conocen ese término) y bocazas. Pero les digo algo? Les recomiendo totalmente organizar un encuentro así, si quieren descubrir nuevos lados en su pareja. Mi novia, ja, de repente me la habían cambiado. Al ir a buscar a mi ex al tren, evidentemente no fui yo sola a buscarla, mi novia recibió a mi ex con un tremendo abrazo cariñoso, que dejo a mi ex fuera de combate durante horas. Destensó la situación en un segundo, y a mí se me caía la baba de admiración. Y mientras cenabamos, mi novia se puso todas las pilas, que supongo que traía guardadas en la maleta, porque es que ni las vi venir. Mi novia resultó ser un prodigio de conversación amena y simpática, hacía chistes, se reía con todo el mundo. Discutía interesada con mi ex todos los temas, sin ser jamás pesada. Y yo estaba observando todo eso con la boca abierta. Esa noche tuvimos sexo genial, para que negarlo. Al día siguiente lució su cuerpo fantástico a todos, ella que es tan tímida con su intimidad, que la inseguriza hasta cuando yo la miro desnuda, ella estaba allí pletórica, rebosando energía. A la segunda tarde (si, ya ven que la fiesta tardó unos días... es que cumplía 40, ameritaba una fiesta bien larga) mi ex se me acerca y me dice, tu novia me ha dejado boquiabierta, es genial, guapísima, amorosa y tan simpática. Y ahí mismo no sentamos y tuvimos nuestra primera conversación tranquila en todos los años que ya no estamos juntas. Sin pensamientos enredados como, y si digo ahora esto, seguro que suena a que todavía me muero por ella, no, mejor pongo esta cara para que piense que sus problemas me interesan bien poco, y, porque ha dicho ahora esto, no se da cuenta que me confunde? .... podría seguir toda la noche recitando, pero seguro lo conoceis...
Y así nos sentamos tranquilamente a contarnos como nos iba en la vida, sin rodeos ni confusiones, abriendonos el alma. No olvidemos que mi ex igual sigue siendo desubicada y obviamente se sintió en la libertad de comentar conmigo las fechorías sexuales con su noviete... yo, que soy ubicada y discreta (yo tambien tengo que quedar bien en esta historia, no?!), no comento jamás intimidades sexuales con mis ex, si comento intimidades de pareja, pero jamás de cama. Valga decir, que mi novia jamás vino a entrometerse en la conversación y que quedo en resumidas cuentas como una reina.
Una reina que yo no veía hace tiempo. Hemos llegado a casa, y aunque las dos sabemos que quizás lo nuestro no es para siempre, que las dos ya hemos tenido nuestro gran amor en la vida, las caricias, los abrazos nocturnos, los deseos han vuelto al día a día. Así que recomiendo encarecidamente un encuentro con alguna ex, si la vida de pareja resulta un poco monotona.

sábado, 21 de marzo de 2009

palabra l

Hace mucho tiempo que colecciono películas de lesbianas, me encanta coleccionar películas de cualquier índole, pero sobre todo las nuestras. De hecho creo que mi salida del armario oficial fue sentada en un cine. Había empezado a estudiar y todos mis pensamientos lesbianicos (por Dios, no sé no como se adjetiva la palabra lesbiana, es tarde en la noche), que por supuesto yo todavía no los nombraba así, pululaban con miles de interrogantes por mi cabeza. Tenía claro que los hombres no me hacían ni el más mínimo plin, de hecho estaba convencida que quedaría soltera toda mi vida ya que ninguno de los hombres que había conocido sobrepasaban la categoría de borde total. Mis amigas me contaban de sentimientos y flujos eróticos y yo no había sentido nada parecido aún. O sea estaba entre soy una rara freaky, tengo que buscar con más ahínco un tipo que no sea imbécil y puede que algo sienta por mujeres pero no sé. Era tarde en la noche cuando venía de vuelta a la pensión paseando por las calles desiertas de la pequeña ciudad. En retrospectiva ahora sé porque paseaba tanto en la noche por la ciudad, no tenía idea donde poner toda esa energía erótica que no había podido salir al mundo. En fin, a medio camino decidí pasar por el pequeño cine arte, porque a veces me gustaba quedarme a la sesión final del cine, era barato, nunca había nadie (en esa época todavía no había video, ni menos pantallas planas gigantes a precios módicos como hoy), así que la sensación de disfrutar sola la película se daba muy a menudo en esta sesión golfa. El cartel que anunciaba la película mostraba sobre un fondo semilila dos mujeres, una rubia y una morena, y ningún hombre. El slogan decía algo así como "Un nuevo erotismo íntimo". Ya sabeis cual es la película: Desert Hearts. Recuerdo que mi corazón dió un pequeño salto, que me puse muy nerviosa y esta vez deseé realmente que no hubiera nadie en el cine. Rebusqué las últimas monedas que tenía en el monedero, gastandome a sabiendas el almuerzo de 3 días y me compré la entrada con manos temblorosas. Porque temblaba? no tenía ni idea... Tuve suerte sólo había una pareja hetero (hoy pienso una pareja hetero?!!), pero se sentaron lejos de mí. Durante toda la película me palpitaba el corazón como loca, y cuando al fin llega la escena de sexo yo ya estaba deshecha. Además la directora tuvo la delicadeza de no mezclarle música a la escena, o sea a parte de ver podías oir perfectamente lo que estaban haciendo. (Si les cuento las veces hasta hoy en día cuantas veces habré visto esa escena erótica me encontrareis patética, supongo que esta en el rango de decenas.) Estaba sentada en esa butaca y literalmente sentí como me inundaba, como mi braga quedaba totalmente perdida. Y en mi cabeza empezaron a juntarse todas esas partes con interrogantes y supe perfectamente en ese momento, cuando veía la escena erótica entre las protagonistas que yo era claramente eso. No me cabía ninguna duda. Y no era como la rubia que según cuenta la historia de la peli se encontró con esta mujer de la cual se enamoró cuando ya era adulta, no, yo era como la morena, la que sabe perfectamente que le gustan las mujeres desde siempre. Al final de la película sólo recuerdo haber estado afuera del cine delante del cartel mirándolo durante horas, tratando de dilucidar lo que me había sucedido. Por supuesto que vi la película durante una semana todas las noches. Que momento tan crucial para mi identidad, y que bonito que me lo regalara esa preciosa película.
Hoy todo es diferente, aparte de tener por supuesto una pantalla plana gigante en mi salón, donde disfruto mis películas a solas, como más me gusta a mí, hoy incluso tenemos el lujo de tener una serie americana de lesbianas.

martes, 24 de febrero de 2009

reminiscencias

Han pasado casi 5 años desde que mi gran amor me rompió el corazón en mil pedazos y me dejó. Se dice que se tarda el doble en olvidar o mejor dicho en superar la ruptura. Ese tiempo ya lo he doblado. Y hay días en que mi corazón se siente igual que a los 5 minutos que ella pronunció esas fatídicas palabras. Parece que el dicho no se aplica a mi persona.
Soy una persona optimista en realidad, con paciencia he barrido los pedazos de mi corazón y los he vuelto a pegar cuidadosamente. Incluso me he vuelto a enamorar. Tambien soy una persona que le gusta estar en pareja. Pero hablemos claro. Ese amor, ese con el cual una sueña desde que empieza a comprender lo que es amor, yo creo que ese sólo viene una vez en la vida.
Tenemos muchos tipos diferentes de amor en la vida. Hay el amor de la mejor amiga, o quizás 2 mejores amigas. Siempre está ahí y forma parte de una, una descansa en él y se siente protegida. Sin persianas, para que vea y comprenda los lados más oscuros de tí. Esos que tan bien escondes de tu pareja, lo que me parece bien, porque ser la mejor amiga de tu pareja es sencillamente fatal. O si no, a quien le cuento los celos terribles que tengo y me los comprende? Con quien puedo hablar mal de mi pareja si es con mi mejor amiga? Tambien está el amor loco, ese amor que te hizo hacer cosas que nunca ibas a pensar hacer, como tirar valores morales por el suelo, o prácticas sexuales prohibidas a tí misma, o locuras insensatas en tu rutina diaria, ese amor en que cada día te preguntas, que coño estoy haciendo?! Quizás tambien tengamos el amor adecuado, esa chica que es parecida a tí, donde el día a día no produce ningún tipo de roce, donde los temas de la vida que te interesan tambien son los de ella, donde siempre tienes la sensación de estar hablando políticamente correcta, donde la sensación fluctua entre tranquilidad y aburrimiento. Ah, y no olvidemos el primer amor, ese donde todo es nuevo, aventuras interminables, descubrimientos de América, paquetes all inclusive de inseguridades y dramatismo de telenovela.
Pero bueno, el amor grande, ese es el que nos interesa a todas. El amor que lo abarca todo. El amor que te hace sentir que llegaste a casa. Donde cualquier sueño te parece posible, sólo porque ella está a tu lado y tú te sientes capaz de todo. Pues bien, yo lo tuve, ella apareció en mi vida y después desapareció. De las miles de veces que me pregunto porque se termino, el 80 por ciento de las veces me consuelo con que ella volverá a mí. Algún día.
Como soy optimista igual disfruto mi vida, igual sigo adelante en mis sueños y trato de hacerlos realidad y convertirme en la mujer feliz que me gusta ser.
Pero hay días como hoy en que veo una película tonta romántica y no puedo dejar de pensar en ella. Mientras los protagonistas se besan cierro los ojos y ahí está, delante mío, mirándome, a 2 segundos de tocar mis labios. Y parece tan real. No hay nada en estos 5 años que pueda sofocar esas imágenes, esas sensaciones que tengo. Y si soy sincera conmigo misma, durante esos largos instantes de reminiscencias, me siento totalmente perdida, sin verle sentido a nada alrededor mío. Ella me falta tanto...
Lo bueno de las reminiscencias es que, después de esos largos instantes, tienden a desenfocarse, a palidecer y a desaparecer a ese lugar del alma donde tienes guardado tus mayores tesoros, y vuelvo a mi vida de nuevo.